Mi marido es paciente del Dr. Trotta, y nos ha ayudado mucho, no necesariamente a curar la enfermedad de Parkinson, sino a vivir mejor con ella.
Doy fe de la sinceridad e integridad del Dr., a quien he recomendado a amigos y todos están satisfechos.
¡Cómo criticar ahora a un médico que no está a sueldo de Big Pharma y que no ha dudado en denunciar la «plandemia» de COVID!
Los que le critican sin haber tenido nunca nada que ver con él deben de estar entre los pagados por Big Pharma.
La medicina propuesta por el Dr. Trotta es la medicina del mañana, y eso no conviene a la industria farmacéutica. Así que a todos sus detractores les digo que, al final, la verdad siempre vence. Gracias, Dr. Trotta.